Geofrom

Una calicata es una herramienta muy valiosa en el reconocimiento de los primeros metros del terreno. En muchas ocasiones la fotografía es solo un testimonio de que ha sido realizada sin que ofrezca más información que la descripción realizada por el Geólogo o Ingeniero competente en esta materia. No olvidemos que, después, un tercero va a analizar estas fotografías en la idea de que puedan servirle como información.

Por ello me permito apuntar algunos consejos que me han venido bien en bastantes ocasiones. No son nada del otro mundo pero ahí están.

• Hace muchos años cometíamos la imprudencia de baja al fondo de una calicata con la ayuda de una escalera extensible, o montados en el cazo de una retro. Esta bajada nos permitía obtener fotos del corte de la calicata que, montadas posteriormente, nos daba una foto alargada representativa del corte. Hoy las lógicas condiciones de seguridad nos obligan a entibar las paredes si queremos inspeccionar el corte directamente; y esta entibación nos impide obtener una buena foto representativa. Yo he empleado en algún caso una cinta de 120 mm de las de amarre de cargas, o eslinga, que desenrollándose de un tambor (en mi caso un cilindro de cartón de enrollar telas o contener planos), me permitía descender la cámara (móvil) obteniendo un vídeo de todo el corte. Después, con un editor de vídeos, se pueden obtener 4-5 instantáneas (una cada 0.8-1 m) que montadas nos dan el corte desarrollado. Parece laborioso pero el resultado es francamente bueno.
• Es mejor obtener la foto del lado de la retro que del lado contario pues la hoja o los dientes del cazo pueden laminar la pared enmascarando la estratigrafía, sobre todo en los suelos arcillosos plásticos y húmedos.
• En días despejados, salvo en las horas del mediodía de algunas semanas de junio (en el hemisferio Norte), el sol incide en nuestra excavación con una cierta inclinación que ilumina de distinta forma las cuatro paredes de la cata. Si tenemos espacio y si las condiciones de seguridad de las paredes lo permiten (pues pueden ser más estables en una determinada dirección) es bueno alinear la retroexcavadora de forma que el cazo excave en la dirección de la sombra arrojada por la máquina. Así tendremos un “testero” iluminado y la pared opuesta completamente en sombra. Una de las dos paredes podrá darnos la mejor fotografía. Con otras alineaciones de la cata tendremos que acudir a corregir con un buen Photoshop, los excesivos contrastes entre zonas en sombra y zonas iluminadas.
• No debemos olvidarnos de que en las fotos se vea la dimensión en profundidad de la cata usando una cinta métrica de topografía, ancha, en la que sean razonablemente visibles las unidades (las hay con marcas coloreadas). En caso de no disponer de una de ellas, podemos confeccionarlas artesanalmente usando las cintas de eslinga anteriormente mencionadas. Bastaría con señalar con trazos y números grandes solo las unidades métricas.
• Es bueno tomar una instantánea del material excavado, el cual debería ser amontonado en acopios diferentes representativos de los niveles importantes.